El departamento de Recursos Humanos de la Fundación CIRD realizó recientemente la jornada RECORRIENDO DE UNA MANERA DISTINTA”, con el objetivo de sensibilizar a sus funcionarios sobre las barreras arquitectónicas que a diario deben sortear las personas con discapacidad física que se movilizan en silla de ruedas.
Los participantes simularon trabajo diario en sillas de ruedas, movilizándose hasta las oficinas, baños, sala de reuniones, etc. Esto les permitió evidenciar muchas falencias estructurales que aún posee la institución y también permitió elevar recomendaciones de cómo hacer de ella un lugar de trabajo más accesible.
“La iniciativa surge justamente debido a que creemos que tenemos que crear conciencia en las personas para poder realizar inclusión social efectiva” señaló Mateo Gadea, coordinador de la jornada “en tal sentido hemos realizado un taller de sensibilización a los funcionarios en lo relativo a la Accesibilidad del CIRD”.
Más allá de lo que significa la adecuación en cuanto a infraestructura, existe un factor que es clave para una verdadera inclusión social: la conciencia de las personas. Cuestiones sencillas como dejar espacio en los pasillos y mantener el orden en las oficinas contribuyen a una mejor accesibilidad para personas con discapacidad.