El nuevo centro de la cultura, que fue el primer inmueble adquirido en el marco de los festejos del Bicentenario, ofrece a la ciudadanía varios espacios, donde en la misma entrada se aprecia la Galería de Próceres, dedicada a los héroes de mayo.
Espacios
En la primera sala, los visitantes pueden observar las distintas publicaciones editadas durante la gestión de la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Nacional del Bicentenario, el pasado año.
En otro sitio de la casa se exhiben objetos y documentos de nuestro Premio Cervantes don Augusto Roa Bastos, en un espacio museístico recreado por el arquitecto Carlos Colombino; mientras que en otro lugar se puede disfrutar de un centro de recursos informáticos y una biblioteca con énfasis en historia del Paraguay y literatura, en la que se encuentran todas las obras del escritor paraguayo y los materiales bibliográficos que formaban parte de la biblioteca del Centro Cultural de la República El Cabildo.
Otro sitio que la ciudadanía tendrá a disposición es el auditorio, con sistema de proyección audiovisual, que podrá ser utilizado para conferencias, debates, presentaciones, entre otros.
Además, la Casa Augusto Roa Bastos cuenta con un amplio patio para la realización de eventos al aire libre, y una cantina.
La dirección del nuevo centro cultural está a cargo del escritor Osvaldo González Real, y la vicedirección, de Teresa Sienra. Para solicitar información, la línea baja es (021) 442302.
El trabajo de recuperación y puesta en valor de la Casa del Bicentenario estuvo a cargo de la Facultad de Arquitectura y Arte de la Universidad Nacional de Asunción, y la restauración de las pinturas murales y cielorrasos en el interior de las salas fue coordinado por el artista plástico Carlo Spatuzza y realizado por un equipo de 13 restauradores del Museo de Bellas Artes, liderado por Petrona Villagra.
Los otros inmuebles que también fueron adquiridos por el Estado paraguayo para su conservación y puesta en valor son, la casa De Gásperi, que será dedicada a la Escena; la casa Jure, que dará espacio a la Música, la casa Centurión, donde se aglutinará a las artes visuales, y la casa Zanotti, que será el Archivo de la Ciudad (que dependerá de la Municipalidad de Asunción) y el Museo Militar (del Ministerio de Defensa).
La Casa del Bicentenario “Josefina Plá” es una de las últimas adquisiciones en el marco del mencionado proyecto, que se encuentra ubicada en 25 de Mayo casi Estados Unidos (ex Club Francés) y será inaugurada en el mes de junio. Allí funcionarán las oficinas del Fondec, la Academia Paraguaya de la Lengua y el Observatorio Cultural del Cabildo.
Valores arquitectónicos
La edificación constituye uno de los escasos ejemplos de la arquitectura de estilo neoclásico francés existente en nuestra ciudad y quizás, su mejor exponente. Fue diseñada por el arquitecto francés George Lavand.
El interior presenta la tipología propia de la casa colonial y post colonial (primeas décadas del 1800), con estructura portante de muros de adobe y aberturas de madera en altura y dimensiones y con fallebas de hierro, propias del momento colonial.
La edificación original, viste un ropaje neoclásico en el primer módulo y fachada, situación característica de la mayoría de las construcciones que perduran previas al 1850, esta transformación de fachada evidencia el cambio del gusto popular al momento de las transformaciones estilísticas del periodo Lopizta.
Valor histórico
La Casa del Bicentenario “Augusto Roa Bastos”, conocida como “Casa Cueto”, y su entorno, poseen una rica historia. Hasta comienzos del siglo XVIII lo llamaban “sitio de San Gerónimo”; allí estuvo la Catedral de Asunción cuando los frailes de aquella Orden religiosa ocupaban ese predio con un convento y una iglesia en el siglo XVI.
Tiempo después, el Cabildo de Asunción cedió dichas tierras al Convento de San Francisco, ya que su antigua construcción, ubicada junto a las barrancas del río (Punta Karapa) se hallaba en peligro de derrumbe.
Fue convento franciscano desde mitad del siglo XVIII hasta 1824, año en que el Doctor Francia extinguió las comunidades religiosas del Paraguay. La de San Francisco pasó a ser Cuartel del mismo nombre, siendo su comandante Mariano Roque Alonso. A la muerte de Francia, éste ocupó el cargo consular, junto con Carlos Antonio López.
Después de la Guerra Grande (1865-1870), aquel sitio fue loteado y puesto en venta; también se trazaron las calles de las Balas (Mariscal Estigarribia) y la de San Francisco (Caballero), formando cuatro manzanas junto a la actual Plaza Uruguaya.
Gran parte de aquel cuartel y ex convento franciscano todavía queda en pie. La “Casa Cueto” formaba parte de aquella histórica construcción. Se la conoce con ese nombre por haber pertenecido a la familia de Julia Miranda Cueto, esposa del Mariscal José Félix Estigarribia. Ambos residieron en esa casa familiar durante los años 1939 y 1940. Y la casa perteneció durante cuatro generaciones a la misma familia.
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